Tu piel

Tu piel no cede
se acerca, me provoca
me sugiere por amor
y me enloquece.

Cada pensamiento
dibuja tu paisaje
tu sonrisa graciosa
tus cabellos sueltos
y mi corazón susurrando...

Latiendo
golpeando
queriendo
queriendo
besarte.

Tu cielo

Tu cielo en mi cielo
mi amor que reposa
cada tiempo en su tiempo
me muero sin miedo
de amor por tu amor
y de nuevo mi cielo
te tengo sin tiempo
deseoso de encuentro
del amor que florece
vagando forastero
tu cielo en mi cielo
amor por amor.

A veces...

Sólo a veces, el silencio.
Y tu voz y mi voz,
y el sonido de nuestros cuerpos,
sólo a veces un sordo corazón
y otra vez el silencio.

Desde mi

Hoy te escribo desde mí.
Mientras susurro tu nombre...

Mientras pienso en tu cuerpo.
En mis ojos golpeando, golpeando en tu mirada
buscando mi alma.

Amor del tiempo detenido
que a gritos se calla.
Sereno espera como si supiera
lo que no sé. Y eso me mata.

Sin tus besos no tengo guía,
me pierdo, me confundo.
Tu rostro aparece y se vaga...

Y tu cuerpo y mi cuerpo...
Y mi alma y tu calma...
Y mis brazos llenos de fuego
y mis labios y tus labios...
Cada rincón del deseo,
deseo de ti cada mañana.

Mientras susurro tu nombre,
la caricia que llama
y mi boca que se esconde,
y mis manos que aprietan,
y mi alma que te busca...
Fuego en el tiempo fueron
las cenizas que hoy se callan.

Hoy te escribo desde mí.
Mientras susurro tu nombre...

Hoy te escribo desde mí.
Quizás mañana, cuando la luz de la tarde se confunda quizás,
quizás mañana…,
alguien escriba por mí.

Mil palabras

Mil palabras...
Pueden no llegar a decir nada.
Me dijeron...

Pero un gesto puede prender fuego bosques.
Lo aprendí...

Mi corazón... Si se viera...
Es un mar de sensaciones
y un volcán de sentimientos...

¡Ay! Si mi boca hablara sus palabras...
Solo una o dos, no más bastarían.

Mil palabras de mi boca...
Pueden llegar a no decir nada.
Lo viví...

Pero una palabra de mi corazón...
Solo una o dos, no más...
Pueden llegar a decirlo todo.
Lo siento...
Mi corazón... Si se viera...

¡Ay! Si mi boca hablara sus palabras...
Solo una o dos, no más...

Hoy no estaría escribiendo las líneas
de las cartas que a ti no llegaron.

En cada rincón

En cada cielo...Tu sonrisa y mi calma.
Y otra vez la voz del viento.
Y más allá…
Mi corazón y tu amor
dibujan los pies descalzos
del alma enamorada.
En cada espacio...
Y aún más allá te quiero.
Beso a beso tu figura
y un sabor que sabe a ajeno.
Dos palabras aún suenan a ti...
A ti...de madrugada.